Jessica Alba es la portada de la edición británica de Women’s Health, donde afirmó que no tiene el mejor cuerpo y además, le aburre el gimnasio.
Pero hay algo en lo que sí tiene disciplina: ¡la dieta!. “Empecé a cocinarme a los 12 años, porque muchos de los alimentos que mi familia consumía eran procesados. Yo quería comer fresco. Eliminé las comidas preparadas en el microondas, cosas con demasiada sal y traté de comer más alimentos naturales, cosas que fueran preparadas en la cocina en vez de en una fábrica”.
Jessica confesó que le costó mucho trabajo bajar de peso cuando en 2011 tuvo a su hija Heaven porque prefería distraerse con su iPad, viendo la televisión, revistas y hacer todo, menos ir al gimnasio.
