El éxito de Crepúsculo ha sorprendido a todos, tanto a los aficionados como a los detractores de la saga. Las historias de amor entre Edward y Bella no ha hecho más que ir hacia arriba, creando miles de parodias a su alrededor que demuestran el enorme éxito que han logrado. Y es que mezclar lobos con vampiros siempre tiene que acabar en éxito, a pesar de que la historia en sí es poco más que un conjunto de ideas y clichés cogidos de varias ideas ya existentes.
Aquí podemos ver una de las escenas más famosas, representada por unos chicos que aunque no se parecen mucho a los protagonistas sí transmiten esa atracción que tanto gustó en la gran pantalla. Eso sí, como buena parodia todo se acaba desmadrando haciendo que el instituto entero se levante y baile al ritmo que marca esta Bella tan particular.
De lo más divertido que hemos podido ver en mucho tiempo, con una puesta en escena que no tiene nada que envidiar a los proyectos más ambiciosos. Con parodias así desde luego que merece la pena que existan sagas como Crepúsculo, por muy poco que puedan gustar ya que los resultados son increíbles en todos los casos.